Hace un tiempo ya hablamos en este blog de los masajes relajantes que realizamos en Quintana Massage y anticipamos que escribiríamos otro artículo sobre una de las técnicas más requeridas por peregrinos y habitantes de Santiago de Compostela, el masaje descontracturante de piernas y espalda. En este artículo vamos a explicar en qué consiste y cuándo es necesaria su aplicación.
Masaje descontracturante de piernas y espalda: qué es y para qué sirve
Todo masaje tiene, en general, un objetivo: generar un cambio en la persona que lo recibe. En el caso de los masajes relajantes el objetivo es provocar una relajación en el músculo y un efecto sedante en el cuerpo en general. El masaje relajante es puro placer.
Un masaje descontracturante de piernas y espalda (la contractura muscular de la espalda baja y el dolor de cuello son dos de las afecciones más habituales que vemos en nuestro centro) busca también la relajación del músculo, pero de una forma diferente: tiene un fin terapéutico. A continuación vamos a explicar un poco esta función terapéutica.
Efectos de un masaje descontracturante
A lo largo del día, nuestro cuerpo recibe diferentes estímulos que lo afectan de distintas formas y lo hacen sobrecargarse. Esto genera las llamadas contracturas musculares, situaciones donde el músculo pierde su estado de “normalidad”. Cuando esto sucede, el músculo adquiere un estado de tensión y contracción permanente, lo cual deriva en síntomas de dolor, rigidez, hormigueos…
Como ya explicamos en este artículo con consejos para cuidar el cuerpo en el día a día, si la situación llega a un punto en que se vuelve insostenible, es el momento de acudir a ayuda externa para recuperar el estado de normalidad muscular.
Aquí es donde entran en juego los masajes descontracturantes.
Un masaje descontracturante es una técnica de tratamiento manual (aunque también se utilizan otras partes del cuerpo, como codos o antebrazos) que busca, mediante la presión, rebajar el estado de tensión y contracción permanente del músculo. Este es uno de los motivos por los que los masajes descontracturantes (tanto de piernas como de espalda) son dolorosos, a diferencia de los masajes relajantes.
Esto último es importante (sobre todo para los que tengan más miedo a sentir dolor corporal), porque es algo inevitable: se está maniobrando sobre un músculo que ya está sensible y dolorido por sí mismo, por lo que al aplicar la técnica de presión sobre él, se reproducirá ese dolor. Y voy más allá: es frecuente que, terminada la técnica, el músculo quede con una sensación dolorida al día siguiente, como si se tuviese agujetas.
Es el peaje que hay que pagar y que, a la vez, hay que comprender que es inevitable para solventar un problema (la contractura muscular) que nos puede generar cosas mucho más graves si no se resuelve a tiempo.
Las zonas más habituales que necesitan masajes descontracturantes son piernas y espalda (al menos, lo que más vemos en nuestro centro, ya que son áreas donde se localizan grandes grupos musculares que sobrecargamos con más frecuencia, bien por posturas, bien por actividad física y deportiva.
Una vez realizado el masaje descontracturante, lo ideal es guardar reposo de actividad física durante uno o dos días, cuidar las posturas (sobre todo en el trabajo) y combinar el efecto del tratamiento manual con otras técnicas como la aplicación de calor (que viene muy bien para calmar ese dolor post-tratamiento que mencioné) y, sobre todo, la realización de estiramientos musculares y ejercicios cervicales.
Esperamos haberos aclarado algunas dudas sobre los masajes descontracturantes de piernas y espalda que realizamos en Santiago de Compostela y su utilidad en casos de contractura muscular. Tan solo nos queda recordaros que, si llegáis a Santiago (o vivís en él) y sentís algún síntoma de sobrecarga, no dudéis en acudir a nuestra sede, en la Plaza de la Quintana. Podéis acceder a nuestra hoja de reservas y servicios en este enlace.
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